¿Que es el yoga? Ocho estadios del yoga según Patanjali

Yoga significa Unión. La unión del cuerpo con la mente y alma. Se puede decir que yoga es el arte de aprender a volver a uno mismo, encontrar nuestros propios límites, ampliar nuestra consciencia, dejar ir y ser capaces de relajarnos en nuestro ser.

Nuestra mente muchas veces se encuentra divagando con pensamientos del pasado o el futuro, poner nuestra atención en la respiración y el cuerpo nos trae al momento presente además de que nos ayuda a conocernos en nosotros mismos y saber que hay en lo más profundo de nuestro ser. En la práctica de asanas aprendemos a observar nuestros pensamientos y sentimientos e irlos canalizando poco a poco para nuestro propio crecimiento personal.

Un escrito llamado Patánjali escribió el Yoga-sutra hace 2.500 años. En el definía esta disciplina como chitta-vrtti-nirodha que significa el cese de las fluctuaciones de la mente. Patánjali entendió la existencia del ser humano como un ser holístico, analizó las cualidades y las funciones de la mente y fue entonces cuando creó los 8 estadios del yoga en los cuales aborda el enigma de la existencia humana y muestra cómo, a través de la práctica del yoga, podemos auto transformarnos, controlar la mente y las emociones, superar los obstáculos de nuestra evolución espiritual y alcanzar la liberación del apego a los deseos y la unión con lo divino.

Los 8 estadios del yoga. “Los yoga sutras de Patanjali”

Los 8 estadios pueden dividirse en 3 grupos Yama y Niyama constituyen la disciplina ética, social e individual; asanas, pranayama y pratyahara conducen a la evolución del individuo, a la comprensión del sí mismo; dharana, dhyana y samadi son los efectos del yoga que aportan la experiencia de la visión del alma.

Podemos hablar del yoga como un árbol que está compuesto de Raíz, Tronco, Ramas, Hojas, Savia, Corteza, Flores y Frutos, todos están integrados y forman el árbol, ese árbol es el Yoga y ninguno puede desarrollarse por separado, si es que quieres ver los frutos, deben practicarse todos en su integridad.

Para conocer el todo, se deben conocer también las partes. Estas partes o componentes del Árbol que equivalen a:

- Yamas, es la raíz.

- Niyamas, es el tronco.

- Asanas, son las ramas.

- Pranayamas, son las hojas.

- Pratyahara, es la corteza.

- Dharana, es la savia.

- Dhyana, son las flores.

- Samadhi, son los frutos.

YAMAS. Yama es un conjunto de reglas morales que controlan tanto nuestras acciones como lenguaje y pensamiento.

• Ahisma: Se traduce como no violencia y se refiere a la compasión por todos los seres vivos. Esto incluye asimismo el trato que recibe nuestro cuerpo durante la práctica de yoga: un exceso de ejercicio muestra desinterés por el cuidado corporal asi que persevera e insiste, pero no fuerces la postura.

• Satyta: significa verdad, honestidad, sinceridad con uno mismo y con los demás seres humanos. Es importante que analicemos en que circunstancia nos encontramos cada día para realizar una postura difícil ya que ante todo debemos evitar traspasar nuestros límites físicos.

• Asteya: se traduce como *no robar* y se refiere a la ausencia de avaricia, es decir cultivar una visión menos materialista de la vida, esto también incluye el no intimidar a una persona para que haga algo en contra de su voluntad.

• Brahmacarya: Se refiere a la moderación en la práctica sexual. Más que castidad, hay quienes lo interpretan como «no derrochar la energía sexual» se trata de buscar un equilibrio saludable porque se ha demostrado que cualquier cosa que hagamos en exceso o por falta puede generar desequilibrios energéticos y crear trastornos mentales o neurosis.

• Aparigraha: Se define como ausencia de la codicia puesto que nos incita a separar nuestras verdaderas necesidades de los simples deseos y ambiciones. No aferrase a bienes materiales ni a pensamientos o emociones.

NIYAMAS: Incorpora la disciplina de las acciones y la conducta, una serie de deberes positivos con nuestros hábitos y pensamientos para poder vivir el momento presente estando bien y felices.

• Saucha: Significa pureza o limpieza abarca desde la higiene física, el entorno, la dieta y los pensamientos.

• Santosha: La practica de un sentimiento de contentamiento, sentirnos satisfechos con lo que tenemos sin embargo esto no incita a adoptar una postura de resignación hacia una condición indeseada, no debemos utilizar este punto como excusa solo porque no deseamos hacer nada para cambiar.

• Tapas: Practica de ponerle ganas las cosas que hacemos tanto en la práctica tanto como el modo en el que vivimos, esto exige disciplina, autocontrol y persistencia.

• Swadhyaya: En este principio aceptamos que existe un principio que todo lo sabe, nos recuerda que esa fuerza superior nos rodea y al mismo tiempo está en nuestro interior. En los textos yóguicos no se nombra ni un solo dios, escogerlo depende de nosotros. Algunos optan por honrar un ideal en lugar de a un único dios.

• Isvara pranidhara: Entrega y renuncia. Libera de los deseos mundanos.

ASANAS: Son las posturas físicas de la disciplina El objetivo de las asanas es purificar el cuerpo y prepararlo para la meditación. En este estado la mente es capaz de mantenerse concentrada en su objetivo sin distracciones generando estabilidad física, mental y emocional.

PRANAYAMA: El pranayama es el control de la energía vital (prana/energía). El pranayama o control de la respiración incrementa la vitalidad y concentración mental además de expandir la consciencia. La respiración actúa como un puente hacia el sistema nervioso y al realisar estas prácticas podemos notar cuan profundamente está conectado con la mente.

Así como la forma en que respiramos varía según nuestro humor, nuestro estado psicológico puede resultar alterado a partir de cambios que experimenta nuestra respiración. La respiración consciente aporta oxígeno y energía a las células y mejora todos los procesos celulares, por lo que se trata de una fantástica fuente de energía. Cuando mejor respiramos mejor nos sentimos.

PRATYAHARA: Es el retiro de los sentidos. En esta etapa hacemos el esfuerzo para alejar nuestra mente del mundo externo y los estímulos externos. Esto nos brinda la oportunidad de llevar la consciencia hacia nuestro interior y observarnos a nosotros mismos.

DHARANA: Significa concentración de la mente. Habiéndonos liberado ya de las distracciones externas nos encargaremos de las distracciones internas o mentales al llevar toda nuestra atención hacia un objeto mental, parte de nuestro cuerpo, una imagen, la respiración etc. Los períodos prolongados de concentración nos conducen naturalmente a la meditación.

DYHANA: Se trata de la meditación, es el flujo ininterrumpido de la concentración. Aunque la concentración (dharana) y la meditación (dhyana) pueden parecer lo mismo, existe una diferencia importante entre ellas.

Mientras que dharana practica la atención de un solo punto, dhyana es en última instancia un estado de plena conciencia sin enfoque. En esta etapa la mente se ha calmado y en la quietud produce pocos o ningún pensamiento.

SAMADHI: Suele ser descrito como el estado de iluminación, de concentración en lo absoluto. En este punto el meditador trasciende al Ser, se conecta con el todo, es una experiencia llena de paz, unión con todos los seres vivos y el universo. Todo esto no se puede comprar ni poseer solo se puede experimentar, la continua devoción del aspirante es el precio.